Aborto espontáneo y principales datos de interés
Numerosas son las mujeres que sueñan con tener un hijo y que, en algún momento, de ese proceso se topan con un obstáculo difícil y doloroso: sufrir un aborto espontáneo. Se trata de una experiencia compleja, dura y que, para poder hacerle frente, requiere ánimo, cariño por parte de su entorno, respaldo de los doctores y también información. Sí, información para entender porqué se ha producido, cómo superarlo y, del mismo modo, qué hacer para dejarlo atrás e intentar volver a ser madre.
En la medida que nos es posible, queremos poner nuestro granito de arena al respecto. Por eso, a continuación, vamos a exponer algunos de los aspectos y datos más relevantes acerca de esa interrupción del embarazo:
¿Qué lo causa?
No se puede decir que exista una única causa que venga a explicar porqué se produce un aborto espontáneo. En concreto, son muchas las situaciones que pueden provocarlo, entre las que se encuentran las siguientes:
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Malformaciones de tipo congénito en el útero de la madre.
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Problemas de coagulación.
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Alteraciones de tipo genético.
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Enfermedades de la mujer como pueden ser el hipotiroidismo, la diabetes, una cardiopatía…
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Miomas en el útero.
¿Cómo se manifiesta?
Además de conocer qué situaciones pueden provocar que se produzca esa interrupción involuntaria del embarazo, también es necesario saber cómo una mujer puede saber que lo está sufriendo. En concreto, podemos determinar que los principales síntomas que lo indican son fundamentalmente estos dos:
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Sangrado vaginal de más o menos contundencia, lo que se conoce como metrorragia.
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Fuertes dolores en la zona del abdomen.
¿Cómo actuar ante un aborto espontáneo?
Es importante que tanto la fémina que cree que está sufriendo un aborto espontáneo como las personas que se encuentran con esa en ese momento en principio, y dentro de lo que sea posible, mantengan la calma. Después, lo que se debe hacer es acudir de manera inmediata al hospital para que el médico pueda examinar a la gestante, proceda a realizarle las pertinentes pruebas, concretamente una ecografía, y así pueda dictaminar si se ha producido o no la interrupción del embarazo.
Tipos de abortos espontáneo
Otro dato importante que hay que conocer respecto a esta clase de aborto que nos ocupa es que puede ser de varios tipos. Más exactamente existen dos criterios para clasificarlos:
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Si se tiene en cuenta el momento en el que se produce hay dos: el precoz, que es el que tiene lugar antes de la semana número 12 de gestación, y el tardío, que es el que se produce pasada la citada semana número 12.
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En el caso de que el criterio que se tenga en cuenta sea la manera en la que se manifiesta nos encontramos con tres tipos de aborto espontáneo: inminente, en curso y diferido. El inminente se produce cuando la fémina tiene síntomas pero no ha expulsado los restos embrionarios; el llamado en curso es el que se produce cuando sí posee síntomas y sí ha expulsado aquellos; y el diferido es el que surge cuando la mujer no ha sufrido ningún síntoma y el aborto le es advertido durante la realización de una ecografía.
Otros aspectos relevantes
Además de todo lo expuesto hasta el momento, hay que conocer más aspectos acerca de esta interrupción del embarazo que nos ocupa, tales como estos:
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Las mujeres que se quedan en estado con 40 años o más tienen muchas probabilidades de sufrirlo. En concreto, los estudios realizados hasta el momento determinan que cuentan con un riesgo que supera el 60%.
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Es importante saber que hay ciertas situaciones que aumentan la posibilidad de que la mujer sufra un aborto espontáneo. En concreto, nos estamos refiriendo a que cuente con obesidad, a que tenga el hábito de fumar, a que sufra una enfermedad de transmisión sexual…
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Después de haber sufrido un aborto espontáneo, es habitual que durante un par de semanas la fémina pueda seguir teniendo sangrado vaginal e incluso dolores abdominales.
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Según cada caso, el doctor vendrá a establecer el tiempo necesario que su paciente deberá esperar para volver a quedarse embarazada. No obstante, de manera general, lo habitual es que proceda a esperar un par de periodos menstruales.
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Cuando la fémina ha sufrido dos o más abortos espontáneos y sigue queriendo tener hijos, deberá confiar en su médico. En concreto, deberá someterse a un estudio para poder dictaminar porqué sucede esa interrupción y cómo se puede evitar, si es posible.
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Cada persona es un mundo, eso está claro, pero, por regla general, quienes han sufrido un aborto de este tipo se enfrentan a un doloroso trance y a un fuerte varapalo emocional. Por eso es importante que las personas de su entorno, especialmente sus parejas y familiares más cercanos, les den apoyo y cariño, eso sí, sin agobiarles.